Llegamos a otoño con tantas ganas de nieve que, estar a finales de noviembre mirando a todas horas las webcams de nuestras estaciones españolas más cercanas (Formigal, Sierra Nevada, etc.) para ver cuánta nieve había caído durante la noche o leyendo los foros de Nevasport para ver que decía la gente sobre la apertura de las Estaciones nos volvía locos.

Por eso, un día decidimos que nuestro primer viaje de temporada sería a un lugar donde nos aseguráramos casi al 100% que estaría abierto y con buena nieve. Y así, dimos con la Estación de Tignes-Val d’Isère, donde si la unión está abierta, tenemos el conocido Space Killy, con más de 300 km de pistas blancas para disfrutar.